El otro día leí en el blog de mi amigo Jesús (http://jessonthebridge.blogspot.com) una entrada que me encantó. Se trata de listar las veinte actividades o situaciones que suponen un placer para ti. Seguro que se me olvida alguno, y que incluyo otros menos importantes... pero ahora mismo, estos son mis 20 placeres.
- Llegar al cole, sonreír a mis niños y que alguno se escape del circle time (momento de asamblea) para venir a darme un beso o un abrazo.
- Escuchar como boba al profesor de mi asignatura favorita y entender todo mi mundo a partir de lo que dice.
- Despertarme por la noche, descubrir que me quedan unas cuantas horas para dormir, dar la vuelta a la almohada para encontrarla fresquita, y volver a dormirme escuchando la respiración de esa otra persona.
- Entregar un trabajo, acabar un examen, terminar una entrega,... y sentir esa plenitud por haber hecho todo lo que me tocaba.
- Y después... recibir una buena nota, con buenos comentarios en los márgenes.
- La sensación de que queda poco para hacer algo que me gusta o ver a alguien a quien hace mucho que no veo. Justo esa sensación que tengo ahora mismo.
- Entrar en Internet, ver fotos de mis niños de años anteriores y sonreír como una tonta. O pensar que me hago vieja viendo la graduación de bachillerato de los primeros niños que tuve como monitora de campamento.
- Oír como Nathan dice mi nombre y darme cuenta de que hasta un María con 3 fonemas confundidos puede ser la mejor palabra del mundo.
- Diagnosticar trastornos de todo tipo conociendo a alguien por 5 minutos y luego descubrir que he acertado.
- Ir al cine con Belén, comprar palomitas, chuches, lacasitos y mucha cocacola y que luego por la noche nos duela la tripa en la cama. Quedarnos despiertas por el dolor (y por la cafeína) y descubrir que cada día puedo hablar más cosas con ella.
- Viajar acompañada, hacer mil planes en el medio de transporte y luego pasar largas horas sentados en un banco arreglando el mundo.
- Tirarme horas hablando con mis padres de cosas que hemos hablado mil veces, con la misma intensidad que al principio, y pensar que tengo suerte.
- Reírme hasta las lágrimas por tonterías, tener tardes de domingo raras, y dejar documentos por escrito sobre ello.
- Llegar a casa después de trabajar, de estudiar, de cansarme... abrir el GoogleTalk y que todos mis problemas desaparezcan por arte de magia.
- Ayudar a mi hermana con su tarea de Science, aprender cosas nuevas, y pensar que, a sus 10 años, me da mil vueltas.
- Compartir una toalla tirados al sol en un parque y estudiar notando la hierba.
- Conseguir que ese niño que no habla con nadie me cuente toda su vida, haga bromas y hasta me pregunte por cosas personales... y darme cuenta de que puedo pisotear los rasgos autistas cuando quiera (o quizás adoptarlos tan profundamente que llego a no verlos).
- Cuidar a esa persona especial y pensar que su vida lo importa todo, que a él la tuya le importe todo, y sentir que ese equilibrio puede durar para siempre.
- Hablar con mis amigos y notar ese entendimiento que a veces roza la unicidad, incluso aunque no estemos de acuerdo.
- Pasear por la ciudad cuando hace frío, hablando de todo y de nada, y comprar castañas.
Dios, eres especial, tienes ángel y lo sabes. Por eso al leer esta entrada se caen las lágrimas y hace recordar millones de momentos vividos y que hacen que me vea en situaciones antes descritas por tí. O será la bendita UNICIDAD, o lo que diablos sea, pero te quiero
ResponderEliminarMuchas gracias María por compartir estos 20 placeres..... como ves tras leerlos, te sientes como libre, y feliz... tu no sabes lo que estoy cambiando con este Máster..... lo mismo acabo levitando como Idigoras.... por cierto me encanta el diseño de tu nuevo blog....
ResponderEliminar